La curva "del Queso"era parada obligada cuando venía a V G Rey después de un tiempo más o menos largo de ausencia. Eso de tener un espacio amplio donde "atrabancar" el coche y echar una "visual" al Valle era como una "enguanada" para el alma... Sentir que la vista se perdía en el infinito sin obstáculos que te impidieran imaginar que volabas sobre los riscos y el mar,era una catarsis, una liberación... Una sana y casi infantil alegría producía el volver a ver los caseríos empuyatados en las laderas , silenciosos e indolentes, desparramados barranco a bajo, bañados por una luz onírica e indefinible , a veces juguetona entre las nubes , a veces dura e inclemente, a veces apagada y triste... pero siempre mística y evocadora de tiempos ya vividos...
¿Tal vez el perfecto círculo de "La Curva", haya creado un punto energético donde las corrientes cósmicas y telúricas se concentran para generar un campo de energías positivas que nos beneficiaba y que tal vez, sólo tal vez, esté siendo dañado por algún elemento extraño al entorno...? ¡¡ Quién sabe !!
¡¡ Yo por si acaso,quitaba el atrabanco ese que están haciendo en el mirador !!
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