La tarde no prometía. Una limpia luz dorada perfilaba a una amorfa nube sin demasiado glamour que se desplazaba lentamente desde el mar hacia tierra,mientras se transformaba de Cenicienta en linda princesita...o tal vez en un nuboso donut...
La potente y limpia luz del atardecer teñía de oro los contornos de la nube y la hacía destacar del cielo cada vez más oscuro... La luna llena, fuera de plano, había alcanzado el punto de colisión...
Vi un nuboso y dorado donut flotando ingrávido y desplazándose lentamente tierra adentro...
¿Hubo suerte? ¿O quizás es una simple ilusión fruto de la fantasía? ¡Qué más da ! Por una vez que nuestra ilusión se hace realidad, disfrutemos y dejémoslo correr...




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